Mantis Voraz (Mantis Devorator, en latín)

Eso es lo que son las Mantis Religiosas, que no van a celebraciones litúrgicas, ni rezan ni creen en Dios. Más bien creen que todo se les debe. O, para ser más precisos, que todo se ha creado para que ellas lo devoren.
Yo misma fui Mantis Voraz en mi vida anterior. Me comí a mi novio, con el que no llegué a ser ni amante. En realidad lo hice porque él se había comido primero a mi amiga. Es como si hubiera hecho un dos por uno. Así me puse. Pero no hice ni dieta ni nada. Va contra mi naturaleza. Lo más que hice fue cambiar de talla. Dejé la piel inservible, por pequeña, muy cerca de un hormiguero. Ellas también comen lo suyo. Unos cardan la lana y otros tenemos la fama, así es la vida. Pero no hay que tenérselo en cuenta, es simple complejo de inferioridad. Yo casi que lo entiendo, ¡son tan pequeñas...!
Después de mi novio vinieron otras cosas. Casi todo lo que encontraba a mi paso: hojas, ramas, (algún que otro golpe me dí por no tener el sentido de la orientación tan desarrollado como el hambre, pero de todo se aprende), insectos varios, salamanquesas muertas, pajarillos caídos del nido... No sigo que sé que puedo herir la sensibilidad de algún alma cándida.
De aquella época me queda un hambre atroz. No sé si te conviene leerme. A veces me da por mirar así como al infinito y  me voy comiendo el horizonte, algunos tonos de verde, las sombras...
Otras veces se me disparan los instintos y me como los libros, principalmente narrativa, saben mucho más jugosos, y ya si tengo mcha, much hamb hast m como ls letrs.

Comentarios

  1. Muy imaginativo, el relato. Eso de comerse hasta las letras, está muy bien. Un saludo.

    ResponderEliminar
  2. ¿Seguro que lo fuiste en una vida anterior? ¿No será en ésta? jajajaja
    Muy bueno!!

    Besos

    ResponderEliminar
  3. Eres genial Tienes una mente joven y rápida para crear

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares