Impensables
Vino el viento y se llevó todas las caricias.
Acusó al tacto de no haberse quedado. Y cuando el tacto se sintió lleno de espinas no quiso tender de nuevo la mano.
Lo rechazó por impertinente, le creyó arrogante.
¡Si el viento supiera que también es brisa! ¡Si el tacto supiera de la suavidad de su reverso!
Vino el viento y se llevó...
ResponderEliminarno se llevó nada bella mujer
está contigo y la maravilla de tus versos
Gracias querida por lo mucho que das cuando me escribes
Gracias Mucha. Tú sí que das. Un abrazo fuerte
EliminarUn sentido poema... de impensables!
ResponderEliminarAbrazos Loles. Creativa...
Gracias Ernesto. Abrazos
EliminarPero qué original lo que has escrito Loles, Y es que además, nos trae una moraleja este relato del viento y el tacto.
ResponderEliminarNo se puede desperdiciar nada, todo lo vale. Y es que debemos dejar el orgullo a un lado.
Un placer leerte, Loles.
Un beso enorme y feliz día festivo.
Gracias por pasarte, por tu comentario ¡y tu beso!
EliminarOtro para tí, María
Que bonito lo que haz escrito
ResponderEliminarmi amigo, muy sentido, un gusto
visitarte.
Besitos dulces
Siby
Poema delicado que va filtrando... como brisa por las rendijas.
ResponderEliminarBesos linda.