Mundos

Tengo más de mil imágenes sin nombre. Danzan, se esconden, se agrupan, se asoman, me guiñan, me retan. Me surgen como un mundo independiente. Una vez dentro cobran vida. A veces es verano. A veces no hay paredes, ni suelo, ni ventanas. 
Lo alimentan mis ojos  con todo lo que bulle, lo que estático se muestra tan cambiante por dos lúmenes de más o tres de menos. 
Lo alimentan historias que he leído, paisajes de pantalla, lugares visitados. Jardines y junglas y mares y estepas. Ciudades tremendas, ciudades diminutas, pequeños poblados de la selva.
Pero busco tus mundos tan distintos. Tu visión, tus anclajes y tus puentes.
Me sorprendes, me asombras, me amplías, me embarullas. Me siembras de imágenes no vistas. De enfoques que no hubiera imaginado.
Un circo de las maravillas que a veces me esponja, me hace reír o me confunde.
- ¿Es para mí? ¿Es para mí?- me oigo desde dentro.
La niña que fui sigue expectante. A veces llora si hablas de dolor.  A veces rebosa, creo que es gratitud, por lo que escribes.
Tengo más de mil imágenes sin nombre y un jardín donde riego tus palabras.


Comentarios

Entradas populares