Evolución acelerada

 Al principio caminaba a cuatro patas. Las de atrás encogidas como una rana. Las de delante, los brazos, extendidas. Las manos en flexión dorsal asiéndose donde podía, o apoyándose sobre los puños. En esa postura su mandíbula inferior estaba adelantada y la barbilla se quedaba algo  corta en comparación al tamaño de la quijada.

Nuestro personaje no necesita diez millones de años para cambiar, porque es síntesis concreta de la evolución. Así que cuando descubre que otros homínidos están de pie se yergue sobre sus cuartos traseros. Es una hembra. Sus hombros se afinan en cuanto lleva varios días ( tal vez sean lustros) al no apoyarse sobre ellos durante la marcha. 

Hay otra transformación severa. Su rostro quedó como mirando al cielo al enderezarse. Se rectifica el perfil. Su frente y su mentón caen ahora sobre la misma vertical. El efecto es una barbilla alargada en una cara que también camina de pie. Ha sido todo tan rápido que casi no se reconoce. 

Por el camino su cráneo también se ha modificado. Ahora tiene más espacio para pensar, para percibir, para imaginar, para sentir ¿De qué rellenará esos huecos?

Los ojos de un yacaré, el salto de un delfín, la luz tanto blanca como en todos su colores descompuesta, el agua, el sonido de la voz, la vibración de la risa, la armonía de la música, el silencio de un campo nevado, el sabor del mar, el tacto de otra piel, el calor de un cuerpo, el vértigo de la verdad propia y ajena, el dolor de las pérdidas, los dolores del parto, la decadencia de la vejez, la conexión del amor, el desbordamiento de las emociones, la locura, la calma, la confusión, la lucidez... Cada nombre al que se asocian, cada mirada que le acompaña, cada hombre, cada mujer, cada infante. La belleza y complejidad de la vida, la alegría

- Oye, oye, que te te estás embalando- Se oye decir con una voz mucho menos gutural que la que antes tenía- Un poquito menos de gravedad, que acabo de estrenar fachada y estoy maníaca.- Y consiguió acallar esa voz en off que la teledirigía.

-¿Y si ahora canto?- Se dice recordando a los pájaros. Y prueba. No conoce aún canciones, pero al azar oye esa de  "San José tiene una burra, rín, rín", que estamos en navidad, y aunque la letra no le dice gran cosa ensaya tararearla. 

- De esto también puedo rellenar un hueco- 

Pasa un coche con "Jerusalema"  a todo volumen y comprueba atónita que su cadera se mueve, sus hombros le acompañan y que lo que le hace moverse es la intensidad del ritmo marcado. 

- Definitivamente de esto también tengo que llenar huecos.

La gente en la calle pensó que debían estar grabando un flash mob o que se trataba de un reto y empezaron a grabar con los móviles.

Algo en su interior le decía que parara. Y lo hizo cuando por fin llegó la policía a deshacer el atasco del semáforo. No pudo enseñar su DNI porque no tenía, y aunque intentó explicar lo de que era síntesis de la evolución intentaron subirla al coche para llevarla al cuartelillo. 

Salió corriendo a todo correr, se subió al caballo de las Tendillas y desde allí oteó la salida de la trampa. 

- De esto poco, si es que salgo de esta.- Sintió la adrenalina y muchos más móviles apuntando a su figura. 

Creo que aún sigue en el Juzgado de Guardia por desacato a la Autoridad. ¡Pobre Lena!


Comentarios

  1. Un amplio y entretenido relato.

    Abrazos Loles.

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  2. Buen día joven.
    Me gustaría responder a tu comentario de ahora en mi blog. Pero por su posible extensión, que haila, y la temática, me hubiese gustado hacerlo en privado. pero no tienes correo a la vista y tampoco un "Formulario de contacto". Que permite la comunicación privada de mí a ti pero sin conocer tu correo. Tú dirás. Sino veré si te respondo en tu blog o en el mío.
    Abrazos Loles.

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    1. Ya está arreglado lo del correo. Gracias por el interés y tu respuesta. Un abrazo fuerte

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  3. Me parece muy bueno y original el relato. Pobre Lena, sí. A veces la evolución no lo parece tanto... Y yo me quedo preguntándome cuánto elijo con qué relleno mis huecos...

    Besos

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    1. Gracias! Mientras escribía me di cuenta de que hay cosas que aligeran el camino a las que no suelo dar mucho valor. Me reí cuando imaginé a Lena bailando, lo suelo pasar bien en las bodas haciendo el ganso con mi familia.
      Un abrazo Alís
      Un abrazo Alís

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  4. me deleita leerte no entiendo a veces solo al final te sonrio y te mando un abrazo inmenso escritora

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  5. Esa voz en off que "la" teledirigía. Creo que en este caso es la, ella es el complemento directo, la que es teledirigida.

    Perdona, Loles, no quiero pasar por corrector, pero es algo que yo siempre agradezco, no tener un corrector. Lo cierto es que hoy, con lo de los terremotos de Granada, me llegó un meme con dos mapas que decía que el laísmo protegía a Castilla de los terremotos (eran casi coincidentes, las zonas sísmicas de Españas con las libres de laísmo). Así que luego tuve un hilo largo al respecto en el chat de la familia, sobre leísmo. Tengo dos hermanas laístas, el resto no (curioso). Mi padre es de Salamanca y no lo es; tampoco lo era mi madre, de Jaén. Me extrañó ese laísmo tuyo, viviendo en Andalucía.

    Si me he equivocado será patético. Pero bueno, jeje. No hace falta que publiques este comentario. Ahora te hago otro sobre Lena. Que por otra parte no sé qué decir :o)

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    1. ¡Pues sí, es la! Me sonó raro, pero ciertamente se podría sustituir por la, así que complemento directo, y ¡la! Lo arreglo. ES curioso lo del laísmo y los terremotos. No se me hubiera ocurrido en la vida la correlación.
      A mí no me importa tener corrector. Soy bastante despistada. Gracias Miguel

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  6. Gracias al comentario que arriba te hizo Alís me he hecho cierta idea sobre las verdaderas vicisitudes de Lena. Supongo que todos necesitamos más baile y menos seso, sí. Yo es que siempre he evolucionado bien despacio. Un abrazo, Loles.

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